Saltar al contenido

Noche «Heartache» con Russian Red

May 22, 2011

Russian Red es la marca de pintalabios favorita de Lourdes Hernández, la cantante y compositora madrileña que hace unos años se dio a conocer a través de My Space. Llegó a poder editar el álbum I Love Your Glasses y se convirtió en una de las chicas más valoradas del circuito indie estatal.

Hace pocas semanas sacó su segundo disco Fuerteventura que contiene canciones más pop y alegres que su anterior álbum y con un cierto aire a los años 50, 60 y hasta 70. El pasado jueves lo presentó en el Auditori de Barcelona ante una sala llena de incondicionales que dejaron salir su lado más romántico y azucarado. La primera sorpresa de la noche, dejando la música a un lado, fue su estilismo. Apareció rubia, con el pelo planchado, un vestido palabra de honor digno de alguna fiesta de Gossip Girl y altísimos tacones. Nada que ver con lo que nos tenía acostumbrados.

El concierto no duró más de una hora y cuarto y faltaron temas imprescindibles como “Nice Thick Feathers”. De su nuevo disco tocó casi todas destacando “Fuertenventura”, el country de “Every day every night”, “Brave Soldier”, “The sun the trees” y su primer single, apoyado con un juego de luces que simulaban una bola de discoteca giratoria, “I hate you but I love you”.

También hubo espacio para sus primeras canciones como “Cigarretes”, la más aplaudida de la noche. Hasta ella misma expresó su sorpresa ante el buen recibimiento que tuvieron temas como “Walls are tired” o “Take me home”. El único que cantó en castellano fue “Todas mis palabras”, un tema de The Magnetic Fields titulado “All my little words” que ya había versionado el grupo Campos Magnéticos. El concierto fue tan excesivamente corto que después del bis la gente no se fue y empezó a aplaudir sin creerse todavía que ya había acabado y que hasta las luces se habían encendido. Oficialmente no formaba parte del espectáculo, pero premeditado o no, volvió a salir ella sola con su guitarra para pedir al público qué canción querían que tocase. Al final, ella misma se decantó por interpretar “It’s a heartache” de Bonnie Tyler. Algo desafortunado ya que por muy espontáneo que pareciese, no se sabía ni la letra y podría haber optado por “Crying” de Roy Orbison como otras veces.

Gracias a una mejor producción y la ayuda de los músicos del grupo escocés Belle & Sebastian han hecho que pueda dar un paso adelante en este nuevo disco. Difícil lo tenía, teniendo en cuenta que el anterior, del que ella no está del todo satisfecha y que no contenía tanta base instrumental, sobresalía por la sólida base de las melodías y su voz. No necesitó nada más. Ahora su discográfica quiere que traspase fronteras y consiga ser un éxito más allá de los conciertos y festivales estatales. Habrá que ver si su éxito no es un cúmulo de circunstancias y de saber estar en el momento adecuado y va a más allá.

No comments yet

Deja un comentario